Hay algo muy importante en la Depresión sobre tratarse con amor. Un@ mism@. Tenerse mucha indulgencia como si fueramos un@s pequeñ@s niñ@s. Perdonarse, quererse, liberarse y mimarse.
En vez de lo que siempre tendemos a hacer, que es culparnos, exigirnos, lamentarnos o victimizarnos.
A amarnos aprendemos sintiéndonos. Dándonos cuenta de que somos humanos, volviendo a sentir que somos personas, igual que las personas externas por quienes nos preocupamos. Entrando en contacto y en conciencia del cuerpo.
Un ejercicio fácil de conexión con vos mism@:
Sentate cómod@, cerrá los ojos, lleva la mano izquierda al corazón y la derecha al ombligo. Y respiá. Sentí la respiración llegar hasta tu mano en el abdomen. Quedate unos largos minutos sintiéndote, sentí todo lo que tengas que sentir y liberá todo lo que quieras liberar de la forma que necesites.
Sentí como hay vida pulsando adentro tuyo y después de vaciarte agradecele. Recordá que tu cuerpo y tus emociones también necesitan cuidado y atención. Está presente para ellos.